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Se trata de un método barato de producir material para el bonsái pero
exige mucho tiempo: algunas semillas tardan dos años en germinar. A esta
técnica se le llama Misho: bonsái a partir de semilla.
Las semillas de los árboles no son viables mucho tiempo y puede que no
germinen bien; incluso semillas carnosas, si no son frescas, se vuelven en seguido
poco fiables. Sin embargo, es el tiempo que tarda el árbol en desarrollar
las características adecuadas para el bonsái la mayor desventaja de este
método; realmente es necesario plantar la semilla en terreno abierto y
dejar que crezca unos años antes de diseñarla y plantarla como bonsái.
En la imgen un Chaenomeles
japonica, (membrillo japonés en flor). A menudo
se da el caso de que los árboles procedentes de semillas no son iguales
a la planta progenitora y, en términos prácticos, un árbol
cultivado a partir de la semilla puede que no presente los atributos correctos,
como los frutos o las hojas pequeñas que lo hicieron la especie elegida
como material adecuado para bonsái. | | |