Rutas turísticas por la provincia de Madrid:

Los primeros asentamientos los encontramos en el Neolítico y la edad del bronce y con posterioridad la habitaron romanos y árabes, siendo tierra de frontera durante muchos años entre los reinos de Toledo y los Reinos Cristianos. Los Reyes Católicos le concedieron la denominación de Real Sitio, aunque su perfil actual comenzo a diseñarse con Fernando VI, quien ordenó trazar el plano de una nueva población. Una sabia combinación de arquitectura y jardines le ha valido a Aranjuez ser nombrada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en diciembre de 2001.

Sitios de interés:
Palacio Real de Aranjuez: Felipe II, haciendo suyo un antiguo proyecto de su padre, el emperador Carlos V, ordena en 1561 la sustitución de la vieja residencia maestral de Aranjuez por un nuevo edificio que es el antecedente del actual Palacio Real. En 1715, Felipe V continúa con las obras y se construye toda la estructura que conforma el actual cuerpo del palacio. Entre 1660 y 1665, sufre graves incendios y Fernando VI encarga su reconstrucción. En época de Carlos III añade dos alas laterales que forman el cuerpo occidental del edificio y que reflejan el gusto de la época por lo francés. Si la parte exterior muestra una gran variedad de estilos, el interior tiene esa misma diversidad. En su decoración se combinan motivos rococós, isabelinos, chinescos y árabes. El pasado mes de octubre concluyó su rehabilitación, tras 10 años de obras.

Casco antiguo de Aranjuez ha sido declarado Conjunto Histórico-Artístico por tratarse de una singular muestra de urbanismo barroco, diseñado en 1747 por Giacomo Bonavia.

Los jardines que rodean el Palacio fueron trazados, construidos y decorados durante dos siglos siguiendo los modelos de Versalles. Así podemos contemplar El Jardín de la Isla, el Jardín del Parterre y El Jardín del Príncipe, todos ellos cuenta con un espléndido arbolado, grandes avenidas y numerosas fuentes de piedra y mármol dedicadas a personajes y escenas de la mitología griega.

Casa del Labrador, una de las construcciones de mayor esplendor de la dinastía borbónica, usado como refugio de caza.

El Museo de las Falúas, situado cerca del embarcadero, donde se pueden ver las lujosas embarcaciones que navegaron por el Tajo y que pertenecieron a Carlos IV, Fernando VII o Alfonso XII.

El Mar de Ontígola es un rico ecosistema de aves acuáticas y flora lacustre, y el Regajal -considerada una de las grandes reservas de mariposas- es una enclave natural con elementos botánicos y entomológicos muy interesantes. Dentro del Regajal se pueden hacer dos visitas a la Finca de Sotomayor con su Casa de la Monta y el Cortijo de San Isidro.