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A continuación se concreta la ruta turística que discurre por la isla
de Tenerife, con el siguiente itinerario: Tegueste, El Sauzal, La Orotava,
Los Realejos, Icod de los Vinos, Garachico y Buenavista del Norte.con
un recorrido aproximado de 70 km.
Miradores-Zona Norte
- Mirador de El Boquerón, al que llegamos por la carretera
de Valle Guerra, (municipio de La Laguna), ubicado en la ladera de la
Montaña de Guerra, a 500 metros de altitud. Las panorámicas
del mirador incluyen una amplia vista de Tejina y Punta del Hidalgo,
así como los pueblos de Tegueste, y Valle Guerra.
- Mirador de La Garañona cerca de El Sauzal, donde el
nos ofrece unas espectaculares vistas de los acantilados de Acentejo.
Este mirador se caracteriza por tener varios niveles de terrazas conectadas
mediante escaleras y rampas con jardines que contienen plantas exóticas
como buganvillas o strelitzias, dando la sensación de encontrarnos
en un balcón al borde de los acantilados, por el este nos se
divisa una amplia panorámica hasta Mesa del Mar y, por el oeste
magnificas vistas de la zona de Isla baja y/o los acantilados del Teno.
- Mirador de Humboldt, en La Orotava, en la ladera de Santa Úrsula
y desde él se admira el Valle de la Orotava, con vistas del Puerto
de la Cruz, La Orotava y Los Realejos, junto a fincas de cultivo de
plataneras. Lo más destacado en este caso es la silueta del Teide
recortada al fondo.
- Mirador de La Corona en los alrededores de Los Realejos, en
la ladera de Tigaiga, localizado en el barrio de Icod el Alto. Desde
allí se divisa también todo el Valle de La Orotava y buena
parte del nordeste de la Isla. Es, además, un lugar privilegiado
para los amantes de los deportes de aventura como el parapente y el
vuelo libre, por lo que a veces merece la pena subir sólo para
ver las velas sobrevolando la zona.
- Mirador del Lance donde una espectacular escultura de bronce
del Mencey Bentor nos da la bienvenida. El Mencey Bentor (lider guanche
viendo su tierra invadida y resquebrajada a base de traiciones y falsos
pactos por parte de Fernández de Lugo, se despeñó
desde estos riscos en suicidio ritual.
- Mirador de San Pedro, situado a 200 metros de altitud. Éste,
nos introducirá en el paisaje denominado Rambla de Castro, un
lugar espectacular por su vegetación exuberante. El mirador incluye
un tramo de la antigua carretera general que conecta dos explanadas
localizadas a la entrada de la Rambla de Castro y detrás de la
ermita. Observamos desde aquí la casona de los Castro, el Valle
de la Orotava y parte de la comarca de Acentejo.
- En la autovía del norte, en dirección a Icod de los
Vinos, encontramos el Mirador de La Grimona, desde el que contemplamos
la playa del mismo nombre, la Costa de El Socorro y la Punta del Guindaste,
con multitud de calas de arena negra.
- Mirador del Mazapé, en los alrededores de San Juan de
la Rambla, que nos ofrece una amplia visión de toda la costa
Norte de Tenerife, desde Buenavista hasta Punta del Hidalgo, así
como el pueblo de San Juan de la Rambla y la ciudad de Puerto de la
Cruz. Lo más destacado de la panorámica son los elevados
escarpes que delimitan el Barranco de Ruiz.
- El Guincho, el último de los miradores que proponemos
en esta ruta, está situado en el límite municipal
entre Garachico e Icod, al borde del paisaje protegido de los acantilados
de La Culata. Disfrutaremos de una panóramica sin igual de la
comarca de la Isla Baja, hasta el faro de la punta de Teno y la villa
de Garachico.
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