Seguidamente, se concreta la ruta turística denominada de las Ruta norte de fuerteventura que discurre por la isla de Fuerteventura, con el siguiente itinerario: Puerto del Rosario, Corralejol, Lajares, La Oliva, Tindaya para regresar de nuevo a Puerto del Rosario, con un recorrido aproximado de de 75 km

El recorrido nos muestra un paisaje plagado de dunas y magníficas playas de arena dorada como la del Médano, Los Matos o Alzada.

• Puerto del Rosario. Capital de la isla donde residió Miguel de Unamuno, desterrado cuando estuvo desterrado. La ciudad se halla ubicada en una suave pendiente que desciende, suavemente, hacia el mar, existiendo interesantes ejemplos de arquitectura tradicional y bellas playas.
• Corralejo, Sitúado en el Norte de la Isla a 40 Km del aeropuerto y 40 minutos en barco de la Isla de Lanzarote. Sus playas son famosas en el mundo por su arena blanca y así al Norte y Este se encuentran las playas y caletas vírgenes del Cotillo con sus lagos interiores, al sur el Parque Natural de las Dunas y el Parque Nacional de la Isla de Lobos que surge del mar como una mole misteriosa, con su lago interior de aguas transparentes de fondos de arena repletos de vida.
  El fondo marino entre Corralejo y la Isla de Lobos,es único por la belleza de sus formas con grandes cornisas, bajones, cuevas y túneles que albergan grandes cardúmenes de peces a escasa profundidad lo que hace el lugar ideal para la práctica del buceo.
• Lajares, a 10 minutos de Corralejo se encuentra este pequeño pueblo más conocido por su artesanía de bordados a mano En la zona sur de la ciudad hay dos molinos de viento, cerca de la iglesia.
• La Oliva: casas señoriales y notable Casa de los Coroneles (s. XVIII, barroca), residencia de los antiguos gobernadores de la isla, con hermosos balcones de madera. La población está rodeada de cultivos de henequén (palmera enana). Malpais de la Arena (Paraje Natural de Interés Nacional): Cono volcánico.
• Tindaya a villa y zona protegida de Tindaya se ubica a los pies de una montaña de 401 m. de altura que tiene su mismo nombre. En su día fue una montaña sagrada hecho que todavía hoy puede constatarse. Es aquí donde Eduardo Chillida hizo realidad uno de sus sueños, crear, en el interior de una montaña un espacio interior que pudiera ofrecerse a los hombres de todas las razas y colores, una gran escultura para la tolerancia.